Cazadores de Sombras. Los Orígenes. Princesa Mecánica - Cassandra Clare

Serie: Cazadores de Sombras. Los Orígenes.


Nombre: Princesa Mecánica (3/3)


Autor: Cassandra Clare


Páginas: 512


Editorial: Planeta

Reseñas relacionadas: Cazadores de Sombras. Los Orígenes. Ángel Mecánico. Cazadores de Sombras. Los Orígenes. Príncipe Mecánico.

Reseñas (sin spoilers):

El tiempo se acaba. Mortmain llega para cumplir su plan y acabar con los cazadores de sombras de una vez, borrándolos de la faz de la tierra y cobrarse al fin su venganza y para eso utilizará a sus autómatas, desalmados y eficaces que harán cuanto les digan sin dudarlo, matando a todo aquél que les ordenen. Mientras, Tessa se prepara para casarse con Jem, cuyo estado de salud sigue siendo bastante precario, al tiempo que trata de averiguar qué es y por qué es tan importante para Mortmain, quién sigue intentando llevársela consigo pero nada será fácil pues nadie sabe exactamente qué pretende Mortmain y cómo evitarlo por lo que la situación comienza a volverse insostenible.

Mi opinión (con spoilers):

La historia

¡NOOOOOOO! ¡SE HA ACABADO! ¡No es posible! :'(  :'( Llevaba esperando el libro un año pero en cuanto lo cerré me di cuenta de que todo se había acabado, de que ya no habría más historias de Tessa, Jem y mi querido Will; de que todo cuanto tenía eran los tres libros anteriores con sus finales amargos y mis recuerdos de mi expectación, aguardando para saber qué ocurriría. Y ahora se ha acabado y no puedo decir que esté contenta y esto es algo que no suele pasarme o sobre lo que no pienso: he acabado muchas colecciones pero esta es la única que me ha hecho darme cuenta de que con ese libro finalizaban las cosas. Y ahora comenzaré a hacer la reseña de verdad o me deprimiré yo solita en mi casa y no podré acabarla nunca.

Bien, todo comienza con un vistazo al pasado, leyendo sobre la muerte de la nieta de Aloysius Starkweather, (quienes toman un papel más relevante en esta última entrega de la saga), y sobre cómo Will y Jem se conocieron, lo que en ciertos momentos me dio pena. Después, comienzan los preparativos de la boda de Tessa y Jem (¿por qué por qué por qué él? ¿Por qué no Will? Entiendo que se esté muriendo pero NOOO) aunque son interrumpidos por alguien inesperado. ¿Adivináis quién? Pues sí, Gabriel (si no lo habéis adivinado no importa). Y bueno, aquí tiene lugar una de mis escenas favoritas del libro, que hizo que comenzara a reírme como pocos libros lo han hecho.

" -Se ha convertido en un gusano. Eso es todo lo que te digo.
- ¿Y supongo que no será posible - preguntó Henry en medio del silencio - er..., pisarlo?
[...]
- Un gusano grande y ciego, como un dragón salido de una leyenda. Tenía la boca abierta, plagada de afilados dientes.
[...]
-Ah - repuso Henry -. Entonces es demasiado grande para pisarlo."

El libro se embrolla aún más que lo anteriores, descubriendo intrigas y tirando de los hilos ocultos en las sombras para acabar dejándolo todo atado y bien atado aunque dudo que ninguno hubiera esperado otra cosa de Cassandra.

Había cosas que a mí jamás se me habrían pasado por la cabeza que pudieran ocurrir en este libro pero Princesa Mecánica me sorprendió en varios puntos aunque no puedo decir que sea de mis favoritos, ya explicaré por qué.

Tengo que decir que realmente me ha encantado las relaciones que tienen Gabriel - Cecily, Gideon - Sophie y Will con todos ellos, con su humor particular que me encanta. Confieso que pensaba que Gabriel me caería mal pero le he acabado cogiendo cariño al igual que a Gideon y a Cecily, porque ha demostrado ser diferente a lo que todo apuntaba que sería aunque las pullas de Will siguen poniéndolo de los nervios.

"- No soy un idiota certificado...

- La falta de certificación no demuestra la inteligencia - masculló Will."

También me he ido convenciendo cada vez más de que Will es el mejor y que se merece ser feliz de una vez por todas, por todo lo que ha sufrido: ¡ha renunciado al amor de su vida por la felicidad de su parabatai por favor! ¿Darle un final feliz es tan complicado? ¿Por qué tienes que hacerle tanto daño Cassie? (Perdonadme pero es que estoy escuchando La suerte de mi vida del Canto del Loco y me estoy poniendo sentimental pero le va realmente bien...)

El libro, en general me ha gustado pero, como ya dije antes, había algunos puntos que no, por ejemplo, ciertas cosas que parece que se saca de vez en cuando de la manga como cuando convierte a Jem en Hermano Silencioso y después, repentinamente, le saca al final. Parece que Cassandra se ha empecinado en ponerle unos finales horribles a la saga de los Orígenes y este es, con mucho, el peor, porque empieza a contarte cómo se muere Will y te deprime muchísimo y te entran ganas de llorar, algo que a mí estuvo a punto de pasarme. Bueno, si quitamos eso, Princesa Mecánica está bastante bien, en la línea de los anteriores aunque te deprime un poco al mismo tiempo que se vuelve interesante y no puedes soltarlo hasta que lo has acabado y lo asimilas todo. Eso sí, se comienzan a montar unas paranoias realmente impresionantes y si no estás atento, puede que te despistes, o no, la verdad es que no tengo ni idea. ;)

Los personajes

Muchos personajes nuevos realmente no hay porque los conocemos a todos de antes aunque no en profundidad, como es el caso de Gabriel, el hermano pequeño de Gideon Lightwood, el único que permaneció al lado de Benedict incluso cuando se supo lo que había hecho aunque al final fue al Instituto a por ayuda y allí se quedó.

También tenemos a Cecily, la hermana pequeña de Will, quién llega al Instituto con la única idea de llevarse a Will con ella de nuevo a su casa, con sus padres, a los que hace años que no ve pero que también termina quedándose en el Instituto más que unos pocos días.

Lo mejor:

Si tengo que elegir algo, la verdad es que tengo que reconocer que las conversaciones tenidas me han encantado en su totalidad y también me ha impresionado muchísimo cómo se las ha apañado Cassie para que todo quedara en su lugar y no fuera forzado (en la mayoría de los casos).

Lo peor:

Odio el final. Con todas mis fuerzas. A muerte. Por eso, para mí, no existe, ya me inventaré otro que me guste a mí.