El corredor del laberinto - James Dashner

¡Hola mis queridos lectores! ¿Qué tal va el verano por dónde quiera que estéis? Por aquí se está muy bien y ahora hace un fresquito relativo así que he decido terminar esta reseña que se me resistía. Os pido perdón por adelantado porque tal vez me ha quedado una reseña un tanto caótica pero es que se me estaba resistiendo y al final he decidido que, como salga, salió, porque ya no sabía por dónde cogerla. Espero que os guste (y que no esté demasiado mal). Un beso ;)

Saga: El corredor del laberinto (1/3)

Nombre: El corredor del laberinto

Autor: James Dashner

Páginas: 532

Editorial: Nocturna Ediciones

Reseña: (Sin spoilers)

Thomas se despierta en una caja que asciende a quién sabe dónde. Solo, sin ningún recuerdo salvo su nombre, no sabe lo que le espera arriba. Una vez llega, ve que no es el único en esa situación: le reciben unos sesenta chicos de diferentes edades y razas, sin nada en común salvo el estar allí. Y el no recordar nada excepto sus nombres. Una vez a la semana, les llegan víveres. Cada mes, un nuevo chico. Viven rodeados de muros de piedra: un laberinto. Las reglas son sencillas: cuando se cierren los muros, no debes estar fuera. Todo sigue un perfecto orden. Y este, sin embargo, se ve roto al día siguiente de su llegada: en la caja, hay una chica. Y con ella, un mensaje que cambiará sus vidas.

Mi opinión: (Con spoilers)

La historia

Thomas se despierta en una caja, sin ningún recuerdo salvo su nombre. Una vez llega a su destino, se da cuenta de que es un extraño recinto rodeado de cuatro muros de piedra. Allí viven unas cuantas decenas de chicos que, cada semana, reciben mediante la caja víveres y, cada mes, llega un nuevo chico. Siempre un chico. Viven así desde hace dos años, cultivando su comida, cocinándola, cosiéndose la ropa, cuidando de los animales… Y unos pocos, que exploran el laberinto que les rodea. Laberinto que no tiene salida y que cada noche, cambia de posición. Las reglas que hay son sencillas: haz tu trabajo, no causes problemas y, hagas lo que hagas, pase lo que pase, no estés en el laberinto una vez se cierren las puertas. Si no, lo más probable es que no sobrevivas a la noche. Todo, desde que tienen memoria, ha sido así, hasta el día después de la llegada de Thomas: en la caja, hay una chica que trae consigo un mensaje que cambiara sus vidas. Otra vez.

Bueno, lo primero que me gustaría decir de este libro es que, sí, me lo he leído en pleno boom del mismo y porque quería ir a ver la película y no me gusta ver la película si no he leído el libro (salvo en excepciones cuando, por ejemplo voy obligada, *ejem* Amanecer Parte 2 *ejem* o no sabía que había un libro: La ladrona de libros). Y, como había leído críticas muy positivas y dos de mis amigas se lo habían leído y me lo recomendaban, cuando mi hermana se lo compró apenas pude resistirme y me lo leí. Del tirón. Me cargué el libro en las cuatro horas que estuve sentada en la piscina. Y, la verdad, es que me ha gustado muchísimo (sí, sé que era bastante obvio…) y ha cumplido todas mis expectativas y, si os soy sincera, no sé cómo me saldrá esta reseña porque no tengo ni idea de por dónde empezar. La historia me ha gustado mucho, creo que nunca había leído un libro de este tipo en el que el personaje no tiene memoria y llega a un lugar donde los demás tampoco la tienen. Bueno, en realidad sí la tienen pero no recuerdan nombres, caras, lugares… Además, por lo general, este tipo de libros están contados por una chica pero no así este, en el que el protagonista es, indudablemente, un chico. El mundo que ha creado James Dashner me ha parecido sumamente original y curioso, con el laberinto que cambia cada noche, los chicos que han conseguido organizarse y establecerse de una forma que, por lo general funciona aún a pesar de ser, en ciertos momentos, algo brutal, como lo son con los castigos que imponen. Por haber estado dos años incomunicados han desarrollado un dialecto propio, con palabras que, al principio, pueden dificultar un poco la comprensión pero son pocas y te acostumbras en seguida. Las criaturas que pueblan el laberinto me han resultado bastante… Extrañas y no me haría ninguna, pero ninguna gracia, encontrarme a un lacerador. En la vida.

“– Hostia, estoy asustado.
– Hostia, eres humano, deberías estar asustado.”

La vida en el Claro, que es como se llama el sitio al que llega Thomas, es… Simple pero complicada. Me explico, consiguen la mayor parte de las cosas por sus propios medios pero otras, como el Suero que usan contra las picaduras de los laceradores, les llega desde fuera, gracias a los “creadores” por lo que dependen mucho de ellos aunque ni los conozcan. Y se darán cuenta de cuánto los necesitan al poco de la llegada de Thomas, cuando llega en la caja la primera chica en dos años (ya os imagináis los comentarios que tienen los amigos…) y las cosas comiencen a cambiar. Todos sospechan que Thomas tiene algo que ver pues con su llegada se desencadena todo y este, aunque no lo dice, está de acuerdo con ellos pues, a pesar de no haber estado allí nunca, el Claro le resulta extrañamente familiar y sabe desde el principio que quiere ser corredor, aun habiendo visto lo que oculta y, cuando Teresa llega, se da cuenta de que le suena. El desarrollo de la historia está muy bien planteado y hay muchas dudas que no se resuelven por lo que supongo que se resolverán en las próximas entregas. Gran parte de los acontecimientos me han sorprendido bastante, sobre todo porque tienes la misma información que Thomas y la que este posee no es mucha así que eres un completo ignorante, como los demás…

Thomas me ha gustado, por lo general, pero había momentos en los que me caía fatal, sobre todo al principio, porque me parecía que se comportaba como si le faltara un hervor. Es que no era más tonto porque no era posible… Por suerte, esto cambia más adelante. Teresa es un personaje que, aunque ocasiona muchas cosas, apenas tiene relevancia porque se pasa la mitad del libro durmiendo. Vale, en coma. Personalmente, me gustaban mucho Newt y Chuck pero más Newt porque Chuck a veces era algo repelente. Alby me daba pena y me he quedado con las ganas de conocerlo más a fondo pero bueno… Minho no sé si me caía bien o mal porque a veces era muy listo y otras, de un tonto que no era normal… Recomiendo encarecidamente no cogerles cariño a los personajes que aparecen porque se mueren la mitad. En este libro. Y, sí a la mayor parte de esos personajes no los conoces pero a otros sí por lo que… Por cierto, tras el final y el epílogo, siento pánico por lo que nos pueden haber reservado para la segunda parte…

Los personajes

Thomas, es un chico que es curioso, por decirlo de alguna manera. Él necesita respuestas y las necesita de momento, lo que lo convierte en alguien impaciente y, en algunos momentos, algo cargante. Por otra parte, es comprensible teniendo en cuenta sus circunstancias. Es una persona muy leal y decidida y un tanto imprudente, pero que no puede quedarse de brazos cruzados sin más, por lo que lo considero un buen protagonista.

Lo mejor

La historia en sí: el planteamiento, el desarrollo, las descripciones, los personajes… Todo me he gustado (prácticamente).

Lo peor

Thomas al principio de la novela y que hay más preguntas que respuestas.