Mentiras - Michael Grant

Serie: Olvidados


Nombre: Mentiras (3/6)


Autor: Michael Grant


Páginas: 528


Editorial: Molino


Reseñas relacionadas: Olvidados, Hambre

Reseña: (sin spoilers)

Tras los sucesos ocurridos en Hambre, los chicos de Perdido Beach viven más o menos en paz: tienen comida, agua, un sistema que funciona (solo en parte, pero bueno) y la gayáfaga parece haber sido destruida. Sin embargo, el mal nunca descansa y puede que la Era guarde más de una sorpresa. Una noche, en medio de un incendio que arrasa la ciudad, los muertos se levantan de sus tumbas y  Sam ve la silueta de alguien que conoce muy bien ¿es posible que Drake siga vivo? Y si es así, ¿tienen derecho los demás a saberlo?

Mi opinión: (con spoilers)

La historia

Después de los sucesos ocurridos en Hambre, Sam y compañía creían poder respirar tranquilos y relajarse un poco. Crearon el Consejo y empezaron a pensar en cómo gobernar Perdido Beach, el comercio comenzó a desarrollarse y por fin tenían agua y comida y un sistema que, aunque a trompicones, funcionaba. Pero la Pandilla Humana sigue por ahí, pensando en cómo crear problemas, Caine está desesperado y puede que tenga un plan. Y cuando los problemas comienzan, el único capaz de hacer algo al respecto es Sam, aunque puede que le pongan restricciones. Y muchas. Sobre todo por parte de Astrid, que comienza a actuar como toda bueno miembro de alguna organización con cierto poder, es decir como alguien ansioso de más poder que se preocupa de los demás y toma las decisiones correctas como mentir a diestro y siniestro tratar de evitar el pánico como mejor sabe: calumniando a la gente sin tener ningún tipo de prueba que sustente lo que dice. Algunos trataron de convencerla de que cambiara de idea pero no lo lograron y terminaron mintiéndole a todo quisqui que se les acercara lo suficiente para ello...

En cuanto a los repugnantes miembros de la Pandilla Humana, continúan llevando a cabo sus viles acciones, asaltando casas, atacando a la gente y aliándose con el enemigo para hacer daño a los que ellos consideran que tienen más privilegios que ellos: los raros. Si ven a alguien sin poderes que vive, habla o incluso está de pie junto a uno de los que sí tienen poderes, van a por él; entran en su casa, les pegan, les obligan a marcharse, en el mejor de los casos, o les entierran vivos en el peor. Claro que, una vez pactan con alguien, no es fácil saber si cumplirán el trato. Sobre todo si el otro implicado es Caine, uno de los dos raros (es la forma más simple de llamarlos) más poderosos de toda la ERA, cuyos planes son más grandes y complejos de lo que parecen a primera vista. Caine está totalmente desesperado: la comida se acaba, se han visto obligados a alimentarse con carne humana y si bajan al pueblo, los matarán, en cuanto les vean el pelo... Por eso mismo deciden marcharse a una isla que puede o no que exista para ver si pueden vivir más tranquilos. Ingenuos. Para lograr eso, necesitan a Zil y a su pandilla de memos redomados, como distracción, algo verdaderamente importante si pretenden robar una lancha...

Nuestro antiguo conocido Quinn es ahora pescador y Lana se ha convertido en algo así como una ermitaña, obsesionada con la Oscuridad, algo que por otra parte es totalmente comprensible. Brianna sigue siendo la Brisa y Edilio está hasta los topes de trabajo, sobretodo tras la desaparición de los muertos. Albert continúa coordinando el mercado (o más bien, acumulando el poder), Astrid (como no me he cansado de repetir) se obsesiona con el poder y comienza a mangonear a Sam y este, se desespera: no soporta que el Consejo lo meta en un cajón cuando quieren y que lo saquen para que les salve el culo cuando llegan los problemas.

Los personajes

Uno de los nuevos personajes más inquietantes es Penny, una rara partidaria de Caine con el siniestro de poder de crear ilusiones tan reales que serían capaces de despertar a los muertos. No tengo muy claro dónde pasó Penny los anteriores dos libros porque nunca oí hablar de ella ni en Perdido Beach ni en la Academia Coates.

Nerezza, la nueva ayudante de Orsay, que ha salido de quién sabe dónde y que muy posiblemente tiene intenciones ocultas. Parece que trata de hacer que Orsay se comunique con la gente al otro lado de la barrera pero todo es posible. Nadie sabe realmente si tiene algún poder (aunque se cree que no) ni a hasta dónde está dispuesta a llegar para lograr su objetivo.

Sanjit. Vive en una isla cuya existencia se sacó de la manga el autor desconocía hasta Mentiras. Parece ser que todos los niños que viven en la isla (que no so pocos) son los hijos adoptivos de una famosa pareja, que desconoces lo que ha pasado en el mundo y no tienen más forma de salir de su casa que un helicóptero que ninguno sabe pilotar.

Lo mejor

Yo encuentro que en esta entrega se presentan más problemas que en Hambre que hacen de Mentiras un libro interesante. También los nuevos personajes que llegan le añaden un aire de renovación que le viene bien y me he reído con las conversaciones entre Sanjit y Choo.

Lo peor

Una de las cosas que menos me ha gustado ha sido el comportamiento de Sam, algo que me ocurrió también en el libro anterior debido a que comienza a compadecerse de sí mismo y comienza a volverse algo patético. Y lo que menos me ha gustado ha sido Astrid porque se vuelve alguien todavía más repelente y despreciable con sus constantes mentiras y engaños (lo que supongo era el objetivo, que ha sido totalmente logrado...)

Y vosotros, ¿lo habéis leído?

¿Qué os ha parecido la reseña?